La compañía Club Create se erigía hasta el año pasado como una de las aventuras empresariales más innovadores y lucrativas del cantante puertorriqueño Marc Anthony, ya que junto al resto de propietarios de la empresa, entre los que se encuentra Corey Simmons, logró incrementar en cuestión de meses la facturación de su negocio al brindar a sus clientes todas las herramientas digitales necesarias para poner en marcha prometedores proyectos discográficos.
Sin embargo, el verano pasado el astro de la música sorprendió a todo su entorno al demandar a Corey Simmons ante un tribunal de Los Ángeles; una medida que el artista justificaba con el impago de un cuantioso préstamo de más de un millón de dólares que en su momento le había proporcionado para poder arrancar la ambiciosa iniciativa.
Un año después de semejante conflicto judicial, del que no se habían vuelto a tener más noticias, Corey Simmons ha decidido contraatacar en el juzgado para destapar las maniobras «desleales» que, a su juicio, habría puesto en marcha el artista durante todo este tiempo.
Como publica el portal de noticias Radar Online, el que fuera socio y amigo personal de Marc Anthony ha remitido al magistrado un extenso documento que pondría de relieve una estratagema que, además de carecer de validez legal, habría supuesto un engaño manifiesto para todos los involucrados en la compañía.
«Para comenzar, Marc Anthony prometió delante de todos los socios que estaba forjando acuerdos y alianzas con otras entidades para disminuir los costes de producción y aumentar de forma evidente nuestros beneficios, algo que nos permitiría conseguir la liquidez necesaria para salvar las deudas iniciales. Pero luego descubrimos que esas negociaciones nunca habían existido, aunque consumieron parte de nuestros recursos», reza el testimonio que ya está en poder del juez.
«Cada vez que alguien ponía en duda lo adecuado y beneficioso de esos acuerdos, Marc Anthony les amenazaba con apropiarse de la compañía a través de una inyección de capital que le daría un poder absoluto. Nos obligó a todos a firmar un documento que, con el tiempo, demostró ser solo una de sus muchas prácticas desleales. Por eso no tiene sentido ahora que vaya reclamando el dinero que supuestamente prestó a la empresa para poder sacar esos negocios adelante», se desprende del documento judicial.
Corey Simmons ha solicitado a la corte que rechace por completo los supuestos intentos de Marc Anthony de «lucrarse» a su costa, principalmente porque los fondos que habría abonado el cantante para ayudar a la compañía ni siquiera estarían registrados en su libro de cuentas y, según su testimonio, se desconoce por tanto su procedencia.
De la misma forma, su exsocio asegura tener pruebas que demostrarían que el intérprete prometió al resto de propietarios que esa «deuda» sería repagada rápidamente con los suculentos beneficios que se desprenderían de sus «inexistentes» acuerdos.