Brasil suma y sigue. La pentacampeona logra imponerse por la mínima ante una Perú sublevada en su feudo de Lima. Con un gol de Marquinhos en los últimos compases del partido, Brasil suma tres puntos clave en un partido trabado donde la selección peruana llegó a ponerle las cosas muy difíciles. Neymar sigue en estado de gracia, afianzándose como el máximo asistente en la historia de las Eliminatorias Sudamericanas. Fernando Diniz logra un pleno de victorias en su debut con la Seleção, colocándose en la punta de la clasificación empatado a puntos con Argentina, pero con la diferencia de goles a su favor.
Brasil llegaba a Perú con la idea de seguir buscando su nueva identidad. Fernando Diniz, a diferencia de sus predecesores, no dudó en repetir el once que maravilló al mundo en la goleada ante Bolivia. Neymar volvía a una casa donde siempre logró ser eficaz, pero encontrándose con una instantánea peculiar; cientos de chamanes se reunieron al rededor del Estadio Nacional para hacerle vudú de cara al partido, con un muñeco con su cara sufriendo las maldiciones que se le echaban. Poco efecto hizo la maldición sobre el nuevo ‘Rei’.
La pentacampeona arrancaría el partido casi sin ideas, pero poco a poco iría encontrándose en el verde del Estadio Nacional. A diferencia del debut, Perú logró plantar más cara a una Brasil que quería seguir sumando. Por minutos, la Blanquirroja llegaría a dominar el partido ante una Brasil desdibujada con un Diniz pidiendo más intensidad y organización a los suyos desde la banda. Brasil golpearía primero en dos ocasiones. Raphinha lograría adelantarse a los 15′ de partido con una llegada en segunda línea, pero el VAR invalidaría el tanto por un fuera de juego previo de Neymar, asistente en la jugada. A la media hora de partido, Richarlison lograría resarcirse tras un debut en casa horroroso, donde llegaría a llorar ante Bolivia al ser sustituido por su abnegación de cara a puerta, marcando de cabeza a centro de Raphinha. Sin embargo, el VAR volvería a anular el tanto por fuera de juego del jugador del Tottenham, esta vez llevándose los pitos y abucheos de la afición tras más de siete minutos de espera.
Brasil volvería al verde de Lima con la sensación de ser superior, pero aún no dar con la tecla. Neymar y Bruno Guimarães distribuirían el juego en busca de darle alas a sus extremos. Sin embargo, con menos ritmo e interacción que en la segunda parte, los de Fernando Diniz se verían más fallones y con menos presencia en campo contrario. Perú no dudó en aprovechar el mal momento para intentar adelantarse por sorpresa, llegando por momentos a asediar el área de Ederson, pero sin casi oportunidades. Raphinha volvería a asustar con un disparo desde la media distancia, pero el vudú parecía haber hecho efecto sobre los brasileños. La entrada de Gabriel Martinelli cambiaría el partido.
El del Arsenal entraría en los minutos finales y no desaprovecharía su oportunidad. Desde sus botas, Brasil resucitaría generando muchísimo desequilibrio por la izquierda ante el cansancio acumulado de la zaga peruana. En apenas dos jugadas, el ‘gunner’ sería uno de los líderes en la resurrección de la ‘verdeamarela’, logrando sacar el córner de la victoria. Neymar pondría un centro milimétrico al primer palo para el adelantamiento de Marquinhos, superando a su marcador y toda la zaga, que cabeceó al segundo palo un testarazo imparable. Una dupla que ya hiciera estragos en Francia, rememorando en Lima que la conexión del PSG aún está vigente, calcando una jugada que tuvo su éxito en París. Brasil, con sangre sudor y lágrimas, lograría una victoria merecida ante una Perú que quiere volver a una Copa del Mundo. Con la primera jornada cerrada, la pentacampeona puede presumir de liderato.
