Con el Barcelona cediendo sus primeros puntos de la temporada el sábado en Pamplona (4-2), el derbi era la oportunidad perfecta para recortar distancia. No la aprovecharon en la medida de lo posible y el Real Madrid queda a tres y el Atlético a cinco.
El Metropolitano, que llenó sus 70.000 localidades -récord de asistencia-, recibió a los suyos con un mosaico que cubrió completamente su graderío y un lema ‘Hasta el fin de mis días’.
La fiesta se estropeó tras el gol blanco y la posterior lluvia de objetos. Había marcado el central brasileño Militao (64), un tanto igualado por el argentino Ángel Correa en el descuento (90+5).
Sin Kylian Mbappé, fuera de su primer derbi por lesión, Carlo Ancelotti no dio la alternativa como titular al prodigio brasileño de 18 años Endrick. Prefirió reforzar su centro del campo con Luka Modric y que Jude Bellingham se acercara al área rival junto con Vinicus y Rodrygo.
El duelo comenzó con ritmo y ambos arqueros mostrando jerarquía. Thibaut Courtois apareció ante Julián Álvarez, una bala por la izquierda (9), y Jan Oblak voló para despejar un zapatazo de Federico Valverde (17).
Ya en la segunda parte, con el partido trabado y cuando ninguna de las estrellas marcaba la diferencia, apareció un héroe inesperado: Militao, control rápido y remate certero desde el pico del área pequeña, aprovechando un servicio de Vinicius. Tras el gol blanco, llegó el bochorno.
El árbitro tuvo que parar el partido porque desde uno de los fondos los ultras comenzaron a tirar objetos, entre ellos botellas y mecheros, a Courtois. Los jugadores se fueron a los vestuarios diez minutos y el técnico rojiblanco Diego Simeone, el capitán Koke y José María Jiménez mantuvieron un diálogo con algunos de los hinchas para pedirles calma.
Tras la reanudación (68) Vinicius estuvo cerca de ‘matar’ el duelo tras ganar la posición a Jiménez y chutar con potencia, pero Oblak salvó a los suyos (73).
futbComo en el arranque del derbi, Courtois dio la réplica a su colega con un manotazo tras un gran disparo de Samuel Lino (82). Cuatro minutos después entró Endrick.
Tuvo un contraataque para marcar, pero su cañón se fue cerca de uno de los postes. El revulsivo rival, Correa, sí acertó, letal tras un servicio de Javi Galán
AFP
